1968
RUMBO A KAMALA
RESIDENCIA UML
Desde el día que he de quedar ciego para siempre
en mi extraviada oscuridad inmensa de silencio
recordaré con fervor su breve mirada inclinada
voz tenue y sutil cuando decía algo que yo entendía
los labios curvados de virgen y diosa ignorada,
era el rostro que el tiempo me dejó inmóvil
que esta vida atormenta y no encuentra más.
Te amaré en el vacío eterno
sin nada para esperar,
ensueños y el aire tibio
la voz liviana y breve mirada
ningún perfume para reconocer
descubriendo la ausencia eterna
te pensaré no sé más
con la mirada imposible siempre.
Se inauguran nuevas las páginas vanas
cantará mudo mi corazón tu nombre
te espero sólo
transformando todo sobre ti
y sin tocar nada de ti
para sentir todo y eterno
lentamente por el tiempo,
mi alma es la que ama.
Sufriré y moriré
es infinito y cierto
sé sin verte también
en silencio
sin nada.
Mis ojos miraban el suelo de tus pasos
la sombra ligera que dejaba tu cuerpo
temiendo tus ojos miraran sabiendo,
te fuiste dejándome esto que no tengo,
te amaré sin nada
perfectamente solo
tu innominado recuerdo temerario,
tu desaparición inesperada una tarde
sólo niebla en los surcos del corazón
a veces algunas trémulas lágrimas
si el espacio se ensancha y hace llano.
Nada
sólo tus pasos que se alejan
dejando esa sombra que digo
que aleja mi pasión imposible
para no tocar nada de ti
inmaculada
en silencio
sin nada
para siempre.
Los pájaros inquietos revolotean cerca al comer,
a pesar del tiempo y el viento infinitos
cada mañana puedo decir algo nuevo de ti.
Son flores blancas y lilas arrojadas a tus pies.
PARA SIEMPRE
A mi hija Martha Alejandra en sus 15 años
Querida hija niña de mi vida
llegó este día anhelado 15 años
tiempo de vientos ásperos
te escribo para siempre
y todo lo quiero hacer para siempre
pues no tengo más cosas que decirte
son las palabras definitivas.
Tu diste forma a mi vida
tu nombre y tus pasos de pajarita
me trajeron hasta aquí
en este momento donde soy feliz
acostumbrado y decidido a vivir
te tengo como mi gran razón.
Yo también, de niño
seguía las hojas secas por la acequia,
esa que aún recorro a veces
frente a mi antigua escuela.
también había una casa de la bruja
de muros altos y solitaria
y caminaba rápido para almorzar
con todos, con estos viejos de hoy.
También tenía una canción
un árbol que era mi amigo
(ayer lo vi desde lejos, en el parque).
Siempre regreso a mi antiguo hogar
sin cansarme, como siempre
y encuentro la misma puerta
los recodos de mi casa antigua
la madre y el padre viejos
y estos rincones
que llenamos de ventanas los hijos.
Soy feliz,
no sé porque quiero llorar
cando quiero decirte
otra vez que soy feliz.
Escuchemos juntos esta música
que dice del amor, de las flores
para unirnos "la familia"
como anoche pasear
…se acaba el tiempo
crepúsculo y alba, el ocaso …
¿sientes como hicimos esta familia?
tu sentada frente a mi
tus hermanas y la mamá a la mesa.
Se feliz y libre
siempre estaré a tu lado
pues tu tienes algo de mi,
un día sentirás quizá
mi mirada en tu mirada
mi acento en tu voz intensa
tu exigencia te preguntarás por qué.
Tú y yo amamos y nos duele
el viejo que nos mira desde la calle
la mujer que es violentada
los niños de Miguel Grau,
sabes que hay un huracán
que es la justicia y el amor.
Cuando sea viejo visítame una vez más
para ofrecerte un café
y sepa de ti fuerte y feliz
de ti libertaria como Luther King
y tengas la ropa que ya no te guste
el tiempo que domaste
lorillos verdes que sorteen riesgos
Yo soy feliz
para siempre,
tendrás una casa parecida a esta
sembrarás flores los sábados
unos niños que acariciar
recogerás a los animales perdidos
muchos libros
amores de los buenos
pero que así es la vida
gritarás preguntando por algo
también te sentarás a hablar despacio
a emocionarse con la vida y este país
así es la vida.
2000-09-24
CUSCO
¡Ah viento frío que amo! ¿Cómo es que viajas eterno?
¿De dónde vienes que llegas rápido para despedirte?
tu puedes bajar y correr entre aquellas voladas resecas
trayendo todos los aromas de tus rutas y estaciones
llegas cantando o en silencio de hermano mayor
levantas y anidas algunas hojas y el polvo lejano
pero son tus amigos pasajeros que dejas distraídos ellos
admiro tu vida libre y universal de historias y música
que puedes besar sin rubor el rostro de quienes amé
o te entienden festivo, travieso y sorpresivo tu arrojo.
Cuando mi vida se haya cansado y todos la olviden
has de llevar libres mis cenizas oscuras y apasionadas,
te pido visiten las chozas que abandonó mi corazón
los pequeños arroyos que de niño surcaban mis veleros
esos parajes de rocas gigantes que no llegué a ascender
a los pies de los montes que descienden floreciendo,
déjame viajar contigo hoy que ya tengo todo el tiempo,
como tantas fantasías y sueños que necesitan del viento.
Hubo veces en que llegabas rugiendo y nos sacudían
tus alas extensas porque algo buscaban revolviendo todo
tenía miedo de ti como los niños que creen inocentes
no sé por qué extraño venías con los rayos y nubarrones
asaltaban nuestras aves y nuestras delicadas flores rosas
tu no escuchabas y eras como un ciego desenfrenado
de pronto también tu presencia contenida como océano.
Déjame respirar mirando la distancia de tu abrazo
los flecos rezagados en los pies o entretenidos aquí,
estoy escribiendo algo que dices entre tus dedos largos
tratando de mirarte de cerca cuando cruzas suave
entender qué debo hacer solo, qué hago sentado aquí.
I
Este es un nido
y tu revuelves cada rincón,
son las hojas y el viento que nos distrae
son las hojas y el viento que nos distrae
tu sabes que todo lo hicimos y es nuestro
estamos juntos con las manos apasionadas
hasta ser una mirada que va de ti a mi a ti
unas palabras que suenan juntas
y caricias de abrigo intenso.
Suenan las cuerdas caribeñas e hindúes
vienen en el viento perfumado de incienso
y hemos sentido que algo pasa de mi a ti a mi.
Tu eres todo
el sueño
eres la alegría que ingresa por los rincones
tu miel de flores silvestres
que alimenta eternamente.
II
Te encontré cruzando los jardines
endulzando los caminos más ásperos,
mis oídos buscaban tu voz en las plazas
mis ojos repetían tu imagen en tu ausencia
mi corazón había llegado al borde de la vida
el viento frío de esos montes te traía cada noche.
Has llegado con cierta ilusión adormecida
escuchando mis largas noticias del mundo
querías conocer conmigo un poco de aventura
porque tenías ganas y esperanzas de la verdad.
III
Llévame al lugar que sólo tu conoces de la mano
mirando levemente hacia adelante
al lugar que no presiento.
Llévame delicadamente
cruzando aquello que descubro
que no entiendo
incluso en la noche
de ti seguramente.
Yo casi detrás tuyo,
condúceme sin vacilar
sorprendiéndome cada paso
en los recodos y el aire que acaricio
que realmente no puedo imaginar
lo que no conozco
todo aquello intuitivo de tu mirada
que sigue adelante
al lugar que sólo tu conoces.
Llévame,
suavemente encadenados
las manos y mi corazón,
yo seguiré tus pasos
sonoros y ligeros
como una tarde, de las tres a las cinco
frente a una amplia avenida
que tu sabes cruzar
y dónde ir.
Llévame para seguirte
confiado como quiero ser
en paz como quiero estar,
llévame de la mano
suavemente
sin hablar
o cantando.
2000-12-03
CUARENTA
Elogio a la madurez
Esto que ya no eres problema, ni interesante aventurero
que sigues las reglas, incluso las enseñas con el ejemplo
te encuentras siempre en casa, los domingos limpieza general
ahorras compulsivamente, sin dejar de comprar algo nuevo
amas a tu mujer y a los hijos, tienes la casa que dijiste querer
bueno, tranquilo, trabajador y barato, ¡eso es la madurez!
Muchas veces fingí ser duro y serio
para eso de educar a los jóvenes
porque con el tiempo lo suelen recordar.
Me pregunto cómo amaba y eso
pues a veces un aliento rosado voltea mi rostro
unos ojos se filtran en los míos... yo los conozco?
subo un escalón y en la calle algo busco brevemente
regreso pues ahora soy así y extraño
nadie nos mira ni espera como antes.
A veces reconozco cierto rumor de flores frescas
pero tenemos las manos rudas
la voz grave y demasiado racional la palabra
entonces nos apartamos y adelante.
Abro mis ventanas
los pisos se llenan de luz
es un día que miro la tarde
con sosiego extraño que descubre
algo entre los árboles y las nubes
y un huracán de adentro me asalta
como una ola detenida que revive.
¿Cómo pude olvidarte?
¿Sin verte más, sin escucharte?
!Oh vida¡
Yo era joven,
podía estrujar mi corazón entre los dientes
arrastrarlo por las calles detrás de tus pasos,
podía llorar por un gesto de tus manos
una mirada o una palabra.
Mi corazón era una montaña azul y blanca
la cual ascendía y derrumbaba todos los días,
de la cual caía cuántas veces impenitente
simplemente por ti, gritando tu nombre.
Era joven y solía descubrir cierta línea en tu pecho
el grosor de tus labios tiernos
también tu mirada de negras palomas,
cantaba en las noches diciendo, te quiero.
eras única y todo.
La música brotaba en las ventanas
el cielo era gris y oscuros los parques
llovía alegremente para mi las tardes.
Yo tenía un amor que flotaba en el aire
que me hería al final de las tardes
cierto perfume de ti...
era así como las historias largas
que dejamos el final porque tenía que vivir,
porque pasó el tiempo
es hoy la vida, plena de espejos y palabras.
¿Cómo pude olvidarte?
detrás de mi ventana
detrás de la lluvia que me encarcelaba.
ahora mi corazón es un círculo
definido en el pecho.
¿Dónde se quedó mi corazón enrojecido?
¿En qué piedra de la montaña se perdió la magia?
finalmente, ¿Qué se ama y qué se olvida?
Ha terminado la lluvia.
¿Qué es el amor?
¿Qué tengo y encadena?
los días largos y tantos recodos menudos
nos extraviaron en urgencias y deberes
empezamos a marchar con prisa y eficiencia
¡Había tanto que hacer y buscar!
Ahora escribo esto para siempre
para escuchar de mi recuerdo fantasías,
aunque las olas me ahogan sólo al verlas.
Simplemente sólo hoy abro mis ventanas
para ver detrás de la luz extraviada
entonces un perfume o las flores
revelan los fantasmas
el amor, los tiempos anónimos.
se va la luz, termina el día
adiós las melodías que olvido
esta vida que pasa cantando
con palabras nuevas.
¿Cómo cierro ahora las ventanas?
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